Mimosa
Vamos a hacer un viaje al pasado, allá por el siglo XIX (1800) cuando había muy poco qué hacer y mucho por inventar… En aquellos tiempos seguramente ya existían bocetos de lo que hoy en día conocemos como los destilados que vamos a comprar a la tienda más cercana, pero se sabe que su sabor no era tan de fiar, o de plano era ya muy ordinario.
Así que la vieja confiable para poderte embriagar con tus amig@s como Dios manda, era tomar cerveza o vino, pero siempre existieron personajes creativos que buscaban maneras para hacer sus curados, entonces empezaron a mezclar vinos con frutas, y más o menos así nació este cóctel que no se hizo verdaderamente famoso hasta la década de 1930 en Inglaterra, posteriormente en el Ritz de Francia.
En ese entonces estas bebidas eran un lujo que pocas personas podían permitirse, pues el concepto de tener una copa globo (como la imagen) con champán, era verdaderamente extraordinario… pero vayamos al grano:
¿Cómo preparar una Mimosa?
La mejor forma de hacerte una mimosa es sin duda usando Champán, pero también puedes preparártelas con el vino espumoso de tu preferencia. La realidad es que hoy en día esto de hacer mimosas ha sido un tema poco explorado en realidad, y desde la invención de los jugos convencionales como el Jumex, el sabor de este cóctel se ha desvirtuado por completo, según nosotros. Por eso, si de verdad quieres armarte unas buenas mimosas con tus amig@s, te recomendamos lanzarte al mercado de abastos por unas naranjas frescas y jugosas para que les saques todo el jugo con tus manos… ¡Verás cómo cambia la cosa!
Para esta receta no ocupas herramientas tan especiales, (Checa este artículo donde te recomendamos los mejores kits de herramientas)
RECETA
Para preparar 1 copa, necesitas:
- 2 onzas de jugo de naranja
- Top de vino espumoso
- 1/4 de onza de triple sec (licor de naranja)
¡Manos a la obra!
En una copa fría añades primero el triple sec, después el jugo de naranja y rellenas con el vino espumoso… ¡Y listo! Tienes una mimosa. Puedes adornar con piel de naranja al borde. Evita poner una rodaja entera, pues se verá medio rara una copa tan pequeña con una rodaja enoorme de naranja.